Un soldado que presta su servicio militar, adscrito al Batallón Ramón Nonato Pérez número 44, denunció a sus superiores de haberlo torturado y maltratado física y verbalmente.

El joven acudió ayer a Medicina Legal en Yopal, y relató que el pasado domingo hacia las 7:00 a.m. el Cabo Elías Peña, lo obligó a comerse siete cigarrillos mientras el Cabo Mateo Cuncuñame le daba agua para pasar los cigarrillos.

Según el joven le daban tiempos de 30 segundos y dos minutos para comerse los cigarrillos, incluida la colilla acompañada de agua, so pena de remitir un informe que afectaría su vida disciplinaria.

Posteriormente al verlo cansado le ordenaron dar vuelta alrededor del plantel hasta que vomitó; luego lo sometieron a hacer ejercicios de rastra con el uniforme que portaba para recibir visita familiar.

Según el soldado se sentía fatigado, sin aliento, a lo que se suma que al estar mojado por las actividades de arrastre dentro del fango le generaron escalofríos y al no poder realizar ejercicio de cuclillas  recibió una patada en el estómago por parte del  Subteniente Mora Rivera Jonathan Javier.

Hacia las 10 de la mañana llegaron los familiares y en la guardia les indicaron que el joven había salido de permiso, pero en realidad él estaba desmayado sobre su cambuche y fue un compañero quien debió despertarlo para que su tía lo viera a quien le narró lo sucedido.

Fue su tía la que gestionó la salida del soldado para llevarlo a un Centro Médico y Medicina Legal; además interpuso la denuncia ante los superiores sobre lo sucedido.

Una de las amenazas era ingresarle marihuana y elementos en su equipo para que lo llevaran al calabozo.

Dijo que varios soldados están bajo el mismo maltrato y zozobra so pena de ser enviados a los calabozos.