No fue necesaria intervención del Esmad en desalojo de predio en Monterrey
Fotos Jaime Avendaño
El escuadrón antimotines de la Policía Nacional, hizo presencia la tarde anterior en un predio de la Alcaldía de Monterrey, “Riberas de San Andrés”, donde unas 120 familias en improvisados ranchos establecieron una invasión.
Los uniformados se formaron frente al predio pero no actuaron, ante la intervención del Alcalde de Monterrey, José Eduardo Ballesteros Jaimes, quién se reunió con las familias que hacen parte de la invasión, pero no les planteó una solución satisfactoria, según informaron.
“Nos propone someternos a un filtro, en donde tenemos poca opción de acceder a un subsidio de vivienda. Hay unas 1500 solicitudes, para 119 casas, que según dicen ya tienen nombre. Es decir no tenemos a la vista opción de vivienda”, señaló Fredy Gómez, vocero de las familias afectadas.
La mayoría de las personas decidió voluntariamente abandonar el predio, sin embargo 6 familias se resistieron. “Ellos están dispuestos a que les peguen, son mujeres cabeza de familia, que entre todas tienen más de 20 niños. No tienen trabajo, ni a donde ir. Son los más vulnerables”, argumentó Gómez.
El escuadrón antimotines de la Policía Nacional, hizo presencia la tarde anterior en un predio de la Alcaldía de Monterrey, “Riberas de San Andrés”, donde unas 120 familias en improvisados ranchos establecieron una invasión.
Los uniformados se formaron frente al predio pero no actuaron, ante la intervención del Alcalde de Monterrey, José Eduardo Ballesteros Jaimes, quién se reunió con las familias que hacen parte de la invasión, pero no les planteó una solución satisfactoria, según informaron.
“Nos propone someternos a un filtro, en donde tenemos poca opción de acceder a un subsidio de vivienda. Hay unas 1500 solicitudes, para 119 casas, que según dicen ya tienen nombre. Es decir no tenemos a la vista opción de vivienda”, señaló Fredy Gómez, vocero de las familias afectadas.
La mayoría de las personas decidió voluntariamente abandonar el predio, sin embargo 6 familias se resistieron. “Ellos están dispuestos a que les peguen, son mujeres cabeza de familia, que entre todas tienen más de 20 niños. No tienen trabajo, ni a donde ir. Son los más vulnerables”, argumentó Gómez.
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