Los palmicultores del país proyectan para 2012 producir un millón de toneladas, una cifra histórica que esperan alcanzar con el acompañamiento de Fedepalma y la aplicación de mejores prácticas de cultivos.
El objetivo de los agremiados es superar la producción de aceite de palma lograda el año pasado, cuando se lograron 940.000 toneladas, 148.000 toneladas más que en 2010, que representan un crecimiento del 25 por ciento.
Entre 2000 y 2011, el incremento anual promedio en la producción fue de 50.000 toneladas, tendencia que empezó a reflejarse a partir de 2004, cuando se rompió la berrera de las 600.000 toneladas.
Jens Mesa Dishington, presidente ejecutivo de Fedepalma, dijo que esta evolución estuvo impulsada por el buen comportamiento de los precios internacionales, especialmente “por reflejo de lo que está sucediendo con la economía petrolera”.
“Esto ha beneficiado a varias materias primas (comodities) como el aceite de palma y le ha dado mayor dinamismo al sector”, aseguró el directivo.
El año pasado el precio internacional del aceite de palma fue de 1.124 dólares por toneladas, un aumento de 250 dólares. En los últimos la última década el precio ha subido 886 dólares. En 2000, el valor por tonelada era de 239 dólares.
Sobre el valor de la producción del sector palmero, esta creció $846.000 millones, al pasar de $1,3 a $2,2 billones.
El presidente de Fedepalma señaló que Colombia tiene 8.000 productores y 427.000 hectáreas sembradas en 107 municipios de 16 departamentos, siendo la zona central la de mayor área plantada (38 por ciento).
Los Llanos Orientales fue la zona que más aceite de palma produjo en 2011, en especial Meta y Casanare, al reportar un crecimiento de 40 por ciento, por encima de la media nacional (25 por ciento), indicó Jens Mesa Dishington.
Sin embargo, el representante de los palmicultores expresó que no todo es positivo porque el sector acusa problemas sanitarios agudos que afectan la producción.
“Hacemos un llamado a los cultivadores para que cuiden sus cultivos, para que detectemos de manera temprana cualquier enfermedad y evitemos la pérdida de un área importante de cultivos”, anotó.
Cooperativas de trabajo
Sobre la polémica que desató el actual Gobierno por el papel que cumplen las cooperativas de trabajo, que obliga a los empresarios a contratar empleados afiliados a estas, el presidente ejecutivo de Fedepalma señaló que el modelo es fundamental para el país porque permite que pequeños y medianos empresarios puedan salir adelante prestando sus servicios.
“La única modalidad de trabajar no es con un contrato o como empleado de una empresa. Muchas personas quieren esquemas más flexibles para trabajar. Incluso, que en el mediano y largo plazo puedan tener mucho más futuro que siendo empleados”.
Dijo que hay personas en el país, con diferentes intereses, que han estigmatizado el modelo cooperativo en el sector palma y otros sectores económicos.
“No se puede olvidar que el Estado es el principal contratante de servicios a través de cooperativas. Hoy hay una enorme polémica alrededor de esto, pero en nuestro gremio hay ejemplos dignos de mostrar”.