Con la realización de un ejercicio de participación, la Unidad para las Víctimas adelantó un diálogo en el cual se concretaron 15 acciones con las que se da seguimiento a la fase de formulación del plan de retornos y reubicaciones de las víctimas de desplazamiento forzado del municipio de Hato Corozal.
Este encuentro, acompañado por la Alcaldía local, fue realizado con la organización sin ánimo de lucro “Forjando caminos de Esperanza”, que agrupa a víctimas del conflicto que tienen representatividad en el territorio y, además, han manifestado voluntariamente su interés de hacer parte de este plan de retorno y reubicación.
Respecto a este proceso, el director territorial, Carlos Arturo Pardo Alezones, aseguró que uno de los beneficios de entrar en esta ruta es la superación de la situación de vulnerabilidad. La vinculación aplica solo para las víctimas de desplazamiento forzado que no hayan sido acompañadas en un plan de retorno y reubicación de tipo comunitario o individual.
De igual forma, Pardo Alezones agregó que la dirección territorial viene adelantando en el Casanare diez planes de retornos y reubicaciones, de los cuales cuatro ya han sido aprobados en los municipios de Monterrey, Orocué, Chámeza y Recetor. Los restantes, entre los que se encuentra Hato Corozal, siguen en su etapa de formulación.
Con estas acciones de participación y diálogo comunitario la entidad busca generar un acercamiento para que sean identificadas las acciones en relación con las necesidades determinadas por la comunidad que ha sido afectada por el desplazamiento forzado y así incluirlas en su proceso de reparación integral.