A pesar de la mejoría que ha tenido Colombia en el ranking de los países más desarrollados en el sector de las TIC, según lo mostró el más reciente informe entregado por el Foro Económico Mundial, este sector posee problemas estructurales que no permiten la competencia justa entre multinacionales de la televisión y los cableoperadores nacionales.
Por ejemplo, hay cuatro puntos fundamentales en el tema de la televisión, que destaca el Senador Jorge Prieto Riveros:
1. Compensación para la televisión por suscripción:
El actual sistema de compensación expedido por la Autoridad Nacional de Televisión – ANTV- en la resolución 045 de 2012, es un sistema que no tiene estratificado a los suscriptores como sí lo hacen todos los servicios públicos. De esta forma, exige una tarifa fija mensual por usuario o “Tarifa mes por suscriptor” de $1.828 pesos que deben pagar todos los cable operadores sin importar si prestan sus servicios a estratos 1 o 6.
Lo anterior, proporciona una gran ventaja a las empresas grandes que ofrecen servicios con tarifas elevadas en estratos altos ya que al momento de contra prestar la tarifa de compensación no se verían afectados en la misma proporción, como sí sucedería con una empresa local que presta servicios con tarifas mucho más económicas.
“Se entiende entonces, que este modelo económico de cobro de la tarifa de compensación está diseñado para el beneficio de las grandes compañías como Directv, por ejemplo, y en detrimento de las medianas y pequeñas empresas colombianas. Adicionalmente se puede concluir que bajo esta fórmula de compensación, son los usuarios de estratos bajos los que están subsidiando a los de estratos altos” señaló el funcionario.
2. Los subsidios discriminatorios: última milla de Internet
En la licitación No. 12 de 2013: “Conexiones Digitales, Redes de Acceso Última Milla” se convocó a las pequeñas y medianas empresas para ser parte integral del proyecto. Sin embargo, el Ministerio de las TIC, en último momento cambió las condiciones de participación de tal forma que negó la posibilidad a estas empresas de competir equitativamente en dicha licitación.
“Recordemos que son los pequeños y medianos empresarios nacionales, departamentales y locales, los que han prestado el servicio de comunicación en lugares donde ninguna otra empresa había llegado. Ahora, el Gobierno parece desconocerlos y por el contrario, sí brindar subsidios a empresas extranjeras. Esta situación ha generado un gran desequilibrio en el mercado que pone a las pequeñas y medianas empresas a competir con tarifas y promociones subsidiadas por el Estado o mediante servicios cruzados”, expresó el Senador.
Durante la presente administración se han entregado subsidios no reembolsables, de dinero de los impuestos y contribuciones de los colombianos, así como contratos a la multinacional Mexicana TV Azteca por cerca de un billón de pesos.
3. Programadores internacionales
La comercialización de las señales y contenidos internacionales no está generando contraprestación al país porque se factura en el exterior. Los programadores internacionales insertan publicidad nacional e internacional sin pagar contraprestación alguna y, además, determinan en forma arbitraria las condiciones contractuales y costos que los operadores de televisión nacional deben pagar por sus señales.
4. Regulación: Caso de Netflix
Actualmente, los entes reguladores del sector tienen un despliegue normativo en virtud de su naturaleza. Prueba de ello, es la vasta reglamentación que hay para los operadores de televisión por cable, comunitaria y las empresas de telecomunicaciones. No obstante, se han abstenido de regular el nuevo mercado de las telecomunicaciones que es competencia directa para los empresarios del país. Un ejemplo claro es el caso de NETFLIX, que presta un servicio similar de transmisión de contenido audiovisual, por suscripción, y al que hasta la fecha no se la ha cargado ninguno de los rubros y cargas tributarias que soportan las empresas tradicionales de transmisión de contenido, como lo son los operadores de televisión.
De esta forma, el Senador Prieto pide verdaderas garantías a las empresas aspirantes a prestar el servicio, pero que además se proteja, priorice e incentive la participación de las pequeñas empresas nacionales.
“Si al igual que en el caso de los hidrocarburos, con la ANH y ANLA, el ejecutivo sigue dictando las políticas a implementar en el campo de las telecomunicaciones, a través de la ANTV y la CRT Colombia va a seguir a merced de los intereses o compromisos del gobierno de turno”.