El Defensor del Pueblo, Carlos Camargo, les recordó a los alcaldes que no hayan alcanzado el porcentaje mínimo de su población vacunada (60%) que deben abstenerse de celebrar ferias, fiestas y actividades masivas en sus municipios, para evitar que se incremente el número de contagiados y posibles muertes por el virus de la Covid-19.
En Colombia, el fin de año es la época en que más municipios y grandes ciudades celebran ferias, fiestas, verbenas, corralejas y demás actividades masivas, las cuales son propicias para que el Covid-19 se propague, y más aún cuando en las recientes semanas las autoridades sanitarias han reportado incrementos en el número de infectados. El último reporte del Ministerio de Salud muestra que la cantidad de contagios a nivel nacional llegó a 5.095.821 personas desde el comienzo de la emergencia sanitaria, con un balance de 129.163 fallecidos.
“Desde la Defensoría del Pueblo, como garante de la protección y promoción de los derechos humanos, particularmente el derecho a la vida y a la salud, hacemos un llamado a las autoridades locales y municipales del país, para que analicen la posibilidad de mantener en la virtualidad las celebraciones en el marco de sus ferias y fiestas, especialmente en aquellas localidades donde el porcentaje de vacunados no supera el 60%. La pandemia no se ha ido y debemos seguir tomando todas las precauciones del caso”, afirmó Carlos Camargo.
El Defensor del Pueblo, resaltó que si bien el Plan Nacional de Vacunación ya se encuentra en la etapa cinco (con 60 millones de dosis aplicadas y 26 millones de esquemas completos) todavía no hemos logrado la inmunidad colectiva o de rebaño, ya que el 35,3% de la población no ha recibido el primer biológico y es susceptible de contagio.
“Los alcaldes no pueden dudar sobre la toma de medidas para salvar vidas, particularmente en los 250 municipios en los que el 60% de la población ni siquiera cuenta con la primera dosis. Esa es su principal responsabilidad”, les recordó el Defensor del Pueblo a los alcaldes.
“El derecho fundamental que todos debemos proteger es el derecho a la vida. Es nuestra responsabilidad como cuidarnos cuidar a los demás, pero particularmente quienes tienen responsabilidades públicas, evitando las aglomeraciones que, sin lugar a dudas, ponen en riesgo la vida y la salud de los ciudadanos”, recalcó.
“Por supuesto, la Defensoría también debe proteger el derecho a la cultura en todas sus expresiones y el disfrute y goce efectivo de la misma, y además anhelamos una reactivación económica urgente, sin embargo, los funcionarios públicos y de manera particular los alcaldes tienen la responsabilidad de proteger la vida y la salud de los habitantes de sus municipios, no hacerlo implicaría sanciones de carácter administrativo”, concluyó Carlos Camargo.
Finalmente, la Defensoría del Pueblo recuerda que es necesario atender las experiencias de otros países que han venido extremando medidas (particularmente en lo relacionado con aglomeraciones, como la exigencia de carné de vacunación y de pruebas PCR negativas), que resultarían muy complejas de cumplir en actividades como las ferias y fiestas en los municipios colombianos, sin contar la imposibilidad de controlar el distanciamiento físico o el cumplimiento de las demás medidas de bioseguridad.