Por Armando Velandia

Es mi opinión, estoy seguro que las fiestas de Yopal no aportan absolutamente nada al desarrollo, progreso y reactivación económica de ningún sector en particular, ni siquiera a la economía nocturna de la ciudad puesto que todo se centra al circulante económico que genera el parque y a las personas que vienen de otros lados a provechar el cuartico de hora, adicionalmente sí creo, que es un absoluto despilfarro de recursos, muy mal utilizados y que debieran invertirse mejor, por ejemplo en la implementación de CAI móviles, mas cámaras de seguridad y campañas agresivas contra la intimidación y delincuencia que azota a Yopal y nuestro departamento el cual se viene viendo afectado.

En las fiestas de Yopal los artistas que no son de la región se llevan una gruesa tajada de nuestro presupuesto, pero las fiestas de Yopal trae consigo también muchísima delincuencia profesional que van de pueblo en pueblo y se aprovechan de una ciudad virgen en seguridad y adicional se quedan.

Señores gobernantes abran los ojos dejen de pensar solo en fiestas y recochas, y en poner cortinas de humo.

Pensemos más bien en el desarrollo de nuestra región, que aporte les van a dejar a sus hijos y los nuestros por este corto tiempo que pasan por las administraciones, pensemos en el futuro no seamos tan inmediatistas.

Me duele el corazón que pasen tantos casos de intolerancia, asesinatos, atracos, robos, y el nacimiento de grupos de pandillas, y no pase nada, no, no es justo que se hagan los de las vistas gordas y no le den la importancia a un problema tan grave como es la inseguridad. Y en los concejos de seguridad no pase absolutamente nada puesto que no hay autoridad, compromiso, y voluntad política, para solucionar de tajo la delincuencia juvenil como la creación de un lugar de paso para menores de edad, para poder ser retenidos por las autoridades, necesitamos la presencia más oportuna y seguida de la policía en los bancos y sus alrededores ubicar los sitios estratégicos de la ciudad, hacer seguimiento a los delincuentes que ya son conocidos y que infringen continuamente la ley.

NO nos convirtamos únicamente en observadores y miembros de las barras de aplausos de los burgomaestres, Denunciemos a los sospechosos no permitamos que se les haga daño a nuestros propios vecinos y no colaboremos seamos solidarios, hoy por mi mañana por ti.