Por: Oscar Medina Gómez **

Los que pensaban que el paramilitar Héctor Germán Buitrago alias “Martin Llanos” era cosa del pasado para los casanareños, están equivocados de cabo a rabo. Nada de eso. La siniestra figura de este negro y fatídico personaje -hoy en la cárcel y a la espera de su condena- está más viva que nunca. Si el gobierno le acepta su propuesta, en los meses venideros este sujeto jugará papel clave, protagónico en la contienda electoral que se avecina. Disputa que decidirá el reemplazo del destituido e inhabilitado gobernador Nelson Mariño, a quien el intocable y santificado Procurador Alejandro Ordoñez le aplicó 14 años de sanción por el enredo del contrato de los restaurantes escolares.

La carta que hace unos días el ex-comandante supremo de la Autodefensas Campesinas de Casanare, ACC, le envió al presidente Juan Manuel Santos Calderón, además de veneno letal contiene una fuerte carga de nitroglicerina. Por donde se le mire es en extremo peligrosa. Claro. Para quienes tuvieron negocios sucios y criminales con Martin Llanos. De ahí que no pocos políticos de la región deben estar pensando largo. Sudando frio y haciéndose pipi a gotitas. Muertos de físico terror porque la mano negra se les puede venir encima.

Firmada conjuntamente con su padre Héctor alias “Tripas” y su hermano Nelson alias “Caballo”, en la comunicación solicitan ser incluidos en la ley de Justicia y Paz. A cambio romperán su silencio y le contarán al país mucho o todo lo que saben de las criminales relaciones de la clase política dirigencial y gobernante casanareña con los bandoleros paracos. Además -dice la oferta de los firmantes- estarían dispuestos a colaborar decididamente para que las miles de víctimas que dejaron a su paso, conozcan la verdad sobre la desaparición y asesinato de sus familiares. De ñapa los buitragueños colaborarían en la desmovilización de los pistoleros que quedan y siguen delinquiendo.

Verdadero o falso, con intenciones extorsivas o no, para el gobierno santista la oferta es tentadora. Sobre todo en el paquete que involucra nombres de políticos de todo pelambre y procedencia. Elemental: sería la excusa para que Santos se bañe en alguito de popularidad, diciendo que tarde o temprano la justicia llega. Que a tono con el proceso de paz con los terroristas de las FARC que se adelanta en Cuba, su mano generosa alcanza para todos. Y más si se trata de un capo de este tamaño. El único de los grandes cabecillas del paramilitarismo que se dio el lujo de rebelársele al gobierno de Uribe Vélez. Despreciando con bravuconadas los insistentes llamados que le hicieron para que se desmovilizara junto con sus gatilleros, no acató el pedido. Huyó hasta que fue capturado en Venezuela, junto a Caballo, hace poco más de un año.

Es cierto que la carta hace referencia directa a los figuras del también destituido gobernador Oscar Raúl Iván Flórez y del actual Representante a la Cámara José Rodolfo “el negro” Pérez. Sí. Pero además de que Llanos propone soltar la lengua sin reparo ni compasión por nadie, en la mente e imaginario de los casanareños está fijada la idea y creencia de que son muchos los alcaldes, gobernadores, diputados, concejales y contratistas que no solo negociaron y entregaron los presupuestos para beneficio del pueblo, a las arcas de los paramilitares liderados por este jefe bandolero. Sino que decenas de gobernantes y funcionarios públicos podrían estar comprometidos hasta los tuétanos con desapariciones, asesinatos, testaferratos, secuestros, boleteos y extorsiones. Por lo tanto la gente espera que paguen los que tenga que pagar.

Jugada así la partida, el gran elector que podría decidir el sucesor de Nelson Mariño se llama Martín Llanos. Ya me imagino el tsunami noticioso e impacto político que causaría en la regiòn este paramilitar en los potenciales electores a gobernador. No más pensemos, por ejemplo -claro- que con sus declaraciones embadurne a los más connotados (as) e ilustres personajes que -con toda seguridad- se le van a medir a pelear la todavía jugosa cartera presupuestal del departamento. Presupuesto que -con todo y recorte de regalías petroleras- sigue con varios centenares de miles de millones de pesos para manipular a su antojo por quien llegue a resultar elegido.

Eso sí en estos aciagos tiempos de sapos y testigos falsos, no hay que creerle a oído limpio todo lo que dicen los bandoleros paramilitares que están encanados. Nada tienen que perder. Y sí mucho que ganar. Esos criminales, con tal de salvar lo mejor posible sus pellejos y negociar sus condenas con varios años de rebaja, son capaces hasta de vender sus hijos y sus madrecitas. Jum…con más ganas a un político de región. Además, no perdamos de vista que desde las cárceles los paracos siguen delinquiendo, extorsionando a muchos políticos con tal dizque de no aventarlos ante la justicia. Por eso lo que ellos declaren siempre hay que cogerlo con guantes y pinzas. De ahí que personajes como Lilian Fernanda Salcedo, Alirio Guzmán, Jorge Prieto, Rodrigo Chaparro, Javier Vargas, Elì Cala y hasta el ex - alcalde de Támara Arcadio Benítez deben estar preparados para una hipotética arremetida de Martín Llanos y su combo. Todo puede ocurrir.

O si no que lo digan Efrén Hernández Díaz -uno de los candidatos a suceder a Mariño- y los hermanos taurameneros Milton y Javier Álvarez -estos dos últimos privados de la libertad y a la espera de su sentencia- a quienes actualmente la Corte Suprema de Justicia les adelanta procesos por sus posibles relaciones con las ACC. Y ni que hablar de los ex - gobernadores Miguel Ángel Pérez y Oscar Leonidas Wilchez Carreño. Y el ex - alcalde de Aguazul Mauricio “el Patón” Jiménez y otros 6 alcaldes casanareños, que terminaron condenados y pagando cana por sus andanzas en el paramilitarismo, según sentenció la Corte.

¡Ah cosa pútrida! Uno ya no sabe qué creer. Uno no sabe qué pensar. El diablo anda suelto. Encarnado en el cuerpo y alma de Martin llanos. Digo yo.
**Periodista - Especialista en Gobierno Municipal y Gestión Pública Pontificia Universidad Javeriana