En Caño Chiquito la Gobernación de Casanare dio apertura a una iniciativa de protección de la fauna silvestre, con el objetivo de salvaguardar la vida de los chigüiros y otras especies en riesgo por la fuerte sequía que se presenta cada año. La inversión se estima en 3.700 millones de pesos.
Este sistema integral incluye la construcción de pozos profundos con bombeo solar, abrevaderos y reforestación, formando un entorno autosostenible. Como parte del proyecto, se plantará una hectárea de bosque por cada pozo instalado, unos 14.300 árboles nativos.
Así inicia la intervención de 13 puntos críticos en las veredas de Caño Chiquito, Centro Gaitán, La Libertad, El Caribe, Normandía y Agua Verde. Estas áreas fueron gravemente afectadas en 2014, cuando una sequía masiva cobró la vida de más de 20,000 animales, incluyendo chigüiros, cerdos, venados, aves y peces.
"Un garcero turístico que se está extinguiendo, podría ser salvado con este proyecto. En ese sitio se ven muchísimos animales de todas las especies. Esto era lo que se necesitaba" señaló Hugo Gaitán, presidente de la Junta de Acción Comunal de Normandía, uno de los líderes comunitarios presentes en la socialización.
Además, se rehabilitarán otros 13 pozos y abrevaderos construidos durante la emergencia de 2014, equipándolos con el nuevo sistema de bombeo solar.
Según Melquis Morales, presidente de Caño Chiquito, el Gobernador cumple lo que promete. "Acá nos entregó 50 abrevaderos que han servido mucho y nos prometió esta obra, y en 10 meses ya tenemos esta solución definitiva a un problema de 10 años", argumentó el líder.