Hoy se reiniciarán las conversaciones entre la compañía Equion y los guardas de seguridad en cese de actividades en el CPF de Cusiana en Tauramena.

Los diálogos se retoman en un ambiente enrarecido por las últimas decisiones de la empresa de vigilancia Colviseg, que comenzó esta semana a cancelar los contratos de trabajo a los guardas de seguridad que se encuentran en cese de actividades impidiendo el ingreso a las instalaciones petroleras.

El paro de los vigilantes en demanda de mejores condiciones salariales completa ya casi un mes.

La Inspectora de Policía de Tauramena, Lucy Espitia Cely, ordenó ayer tarde el desalojo inmediato de los guardas de seguridad que tienen bloqueado el ingreso al descargadero de crudos de Ocensa en el CPF de Cusiana.

La funcionaria accedió a las pretensiones del apoderado de Ocensa, Juan Sebastián Arias, y en la diligencia para resolver la querella de restitución del espacio ocupado expresó por escrito, que el comportamiento de los trabajadores ha sido ilegal, abusivo y arbitrario.

La Inspectora de Policía advirtió a los guardas de seguridad que en caso de no retirarse voluntariamente de las puertas de ingreso a la empresa, serán retirados a la fuerza.

Equión ha rechazado reiterativamente los bloqueos, argumentando que ponen en peligro la vida y la integridad de las personas que trabajan en las instalaciones, el entorno de las mismas y la infraestructura de la operación.

Igualmente la empresa afirma que ha cumplido con todos los compromisos adquiridos en las mesas de concertación del 2010 en Tauramena, en las que participaron activamente autoridades locales y nacionales, comunidades y todos los sectores representativos de la sociedad. En estas mesas se establecieron, entre otros, acuerdos salariales que se han respetado, algunos de los cuales entraron en vigencia a partir del 1 de julio, tal como fue acordado en su momento.

MÁS CONFLICTOS CON PETROLERAS EN TAURAMENA

De otro lado, las comunidades de la zona sur de Tauramena se reunieron ayer en la Vereda Corocito para exigir a la empresa Winchester la conservación de la carretera que ha destruido por el tráfico de maquinaria pesada.

El deterioro de la vía entre Caribayona- Buenos Aires Alto y Bajo en un tramo de 36 kilómetros está afectando a los campesinos.