El cáncer de piel, específicamente el llamado carcinoma basocelular, es el tumor más frecuente en el ser humano. Los casos nuevos de este tumor han venido aumentando en las últimas décadas, detectándose cada vez en pacientes a menor edad.
Una de las maneras de prevenirlo es el uso de antioxidantes que limitan el daño a los tejidos y protegen la piel de enfermedades, incluyendo el cáncer.
Se conoce que la causa principal de este tumor es la radiación ultravioleta, nuestro país, por su geografía y su mestizaje, que incluye una gran parte de la población con piel clara, está en alto riesgo de desarrollar este tumor.
En nuestro país hay un aumento en la frecuencia de casos de este cáncer, según el médico dermatólogo y especialista en laser y tecnología Andrés Naranjo "como lo demuestra el estudio dermatológico realizado por el centro dermatológico Federico lleras Acosta, el cual es centro de referencia en dermatología a nivel nacional, se han duplicado los casos nuevos pasando de 4 por 1000 consultas en el 2003 a 11 por cada 1000 consultas en el 2011 y la tendencia sigue en aumento”.
"Teniendo en cuenta que la localización más frecuente es la cara, este tumor puede generar alteraciones funcionales, estéticas y emocionales, afectando la calidad de vida. Es importante la forma y frecuencia de aplicación del protector solar, ya que usualmente es inadecuada en las personas, siendo necesario implementar medidas adicionales para la prevención del daño cutáneo por factores ambientales”, recomienda el especialista Naranjo.
Los llamados antioxidantes tanto tópicos como tomados, limitan el daño a los tejidos por parte de las especies reactivas de oxígeno, realizando una prevención, corrección y protección de la piel contra agentes implicados en la generación de enfermedades de la piel, incluyendo el cáncer.
Para el dermatólogo Andrés Naranjo "Los componentes activos como vitamina C pura y estabilizada, el ácido ferulico, el floretin, el resveratrol, la kombuchka, las qatequinas del té verde, el picnogenol, entre otros, son sustancias con efecto antioxidante, con capacidad de neutralizar la acción del daño causado no solo por la radiación sino además por los agentes ambientales que ocasionan el daño cutáneo que predispone al cáncer de piel, como se demuestra en estudios clínicos”.
Por esta razón una de las maneras más efectivas de prevenir este tipo de tumores es el uso al menos de un antioxidante estabilizado, con las concentraciones apropiadas, asociado a un protector solar de buena calidad. Siguiendo la recomendación y consulta por el dermatólogo, los cuales deben ser incluidos diariamente en la rutina diaria del cuidado de la piel.