Como parte del programa Familias Fuertes Amor y Límites, creado para la prevención del consumo de sustancias psicoactivas en niños de entre 10 y 14 años en Casanare, se dio inicio al proceso de capacitación de profesionales en psicología y trabajo social de todo el departamento.
La iniciativa, aprobada por el OCAD regional, será operada por Red Salud Casanare y tiene por objetivo prevenir conductas asociadas a factores de riesgo para el consumo de sustancias psicoactivas en adolescentes a través de lazos familiares y la promoción de la comunicación entre padres e hijos.
Julieta Palacio Pinzón, referente de Reducción del Consumo de Sustancias Psicoactivas de la Secretaría de Salud Departamental, expresó que, este programa es una estrategia de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y Organización Panamericana de la Salud (OPS), basado en la evidencia, y “fue implementado en una primera fase en el departamento, donde se intervinieron 890 familias. La meta para este año es poder intervenir 800 familias con hijos adolescentes entre los 10 y 14 años, en los 19 municipios de Casanare”.
En el programa se desarrollan siete sesiones dirigidas a padres o tutores, adolescentes y familias, con base en ejercicios pedagógicos que buscan fortalecer la estructura y la dinámica familiar.
Transcurridos seis meses de esta primera etapa, se realizará un seguimiento a las familias intervenidas con el fin de evaluar el impacto de la estrategia en ellas. Así, una vez se termine el proceso y se evalúe, los profesionales capacitados, recibirán certificados de la OPS, el Ministerio de Protección Social, y el Ministerio de Justicia como facilitadores del Programa Familias Fuertes.
María Esther Soto Jiménez, capacitadora del Programa Familias Fuertes Amor y Límites, manifestó que, “la expectativa es formar a estos profesionales para que puedan hacer la implementación en las familias que se van a intervenir, con el fin de prevenir el consumo de sustancias psicoactivas en adolescentes, prevenir las relaciones sexuales a temprana edad y mejorar las relaciones de los adolescentes con sus padres”.