El 21 de octubre de 2024, un grupo de pacientes vinculados a la EPS Capresoca quedaron a la deriva en Bogotá tras la cancelación inesperada de sus citas médicas en el Instituto Nacional de Cancerología en Bogotá, según denunció María Quintana, hija de una de las afectadas con cáncer metastásico.
"Mi madre y otras 13 o 15 personas viajaron a Bogotá para cumplir con sus citas programadas, pero fueron canceladas sin previo aviso. Ahora estamos sin apoyo, ni siquiera con tutela", explicó Quintana. La familia, al igual que otros afectados, ha tenido que asumir los costos de transporte y alojamiento, sumidos en la incertidumbre y sin respuestas por parte de la EPS.
Los pacientes, que requieren atención médica inmediata, como inmunoterapia y consultas especializadas, ven cómo sus tratamientos vitales se retrasan. "Mi madre debía recibir inmunoterapia, pero debido a complicaciones en los riñones, se pospuso, y ahora las citas del 24 y 25 de octubre con especialistas fueron canceladas. No sabemos qué pasará con su tratamiento".
La falta de opciones ha puesto a estos pacientes en una situación crítica, ya que muchos dependen del albergue donde solían hospedarse durante su estadía en la capital. Sin embargo, tras la cancelación de las citas, se ven obligados a regresar a Yopal con recursos propios.
Quintana hizo un llamado, exigiendo soluciones por parte de la EPS Capresoca y alternativas que garanticen la atención médica de los pacientes.
Los afectados esperan que la EPS responda prontamente para evitar que se siga poniendo en riesgo la salud de los pacientes con enfermedades catastróficas como el cáncer.