Presencia masiva de aves de rapiña, olores nauseabundos y desordenes continuos denunciaron vecinos de la Central de abastos de Yopal como consecuencia de la indebida disposición final de residuos, en especial los generados por el mercadeo de carnes.

Habitantes del sector llamaron la atención de las Secretarías de Salud, Gobierno y el Idury para que vigilen y hagan cumplir la norma con respecto a la disposición de residuos, ya que se está haciendo en una simple bodega con teja de zinc y según las políticas de almacenamiento de residuos sólidos, se debe contar con ventilación, rejas, drenajes para los lixiviados, además de un proceso de lavado constante.

Manifestaron que el manejo de la Central de abastos es competencia del IDURY que nunca hace presencia y al interior de la administración de la plaza, nunca se ponen de acuerdo.

Afirmaron que no hay procedimientos para limpieza de la bodega donde almacenan las basuras y en sus zonas aledañas.

“Al Shuck de basuras de la central de abastos llegan las vísceras de los pescados, las gallinas y algunas partes de reses, por lo que con las temperaturas en poco tiempo se convierten en picheras, llamando los perros callejeros, las ratas y los chulos”, afirmó crudamente un vecino del sector calificando de insoportable la situación que viven a diario.

Agregaron que insistentemente han solicitado al IDURY poner orden a ese tipo de comportamientos, ya que las basuras ni siquiera son dejadas en la bodega, sino a las afueras, pero no han sido escuchados y la situación es insostenible en la zona donde además se presenta un foco de roedores, cucarachas y vectores que les están generando enfermedades a los residentes, colocando en riesgo en especial a los niños, según argumentaron.