Nuevas averías y grietas presentan los apartamentos del conjunto residencial Torres del Silencio en Yopal, edificaciones que completan 10 años de haber iniciado la construcción, sin que se hayan podido entregar a satisfacción a los beneficiarios por varias irregularidades cometidas por el cogestor Iader Barrios.

Al proyecto que contempla soluciones habitacionales para 400 familias se le debe hacer un estudio de patología, torre por torre, para descartar errores estructurales que puedan terminar en tragedia y que incluirían incluso una orden de demolición.

Los estudios de patología en las construcciones los realizaría la UPTC, tal y como lo hizo en Tunja a una propiedad horizontal edificada por el mismo constructor Iáder Barrios y que como consecuencia sus habitantes debieron ser evacuados tras la alerta de posible colapso.

Torres del Silencio no ha sido liquidado y se espera que con el informe que presente mañana la interventoría del proyecto contratado por la Gobernación de Casanare, se pueda realizar el proceso que le daría paso a la adecuación del conjunto.

Sin embargo, se informó que sin la Patología es imposible realizar trabajos en los apartamentos, así como de pavimentación, por el temor a que movimientos de maquinaria como vibro compactadores, originen el colapso de las estructuras, donde ya hay al menos 200 familias que se pasaron tras la urgencia de contar con vivienda propia.

En Tunja en Torres del Parque, conjunto construido por Iader Barrios, se ordenó la demolición de 6 torres, por condiciones de seguridad y tras un estudio que demostró que los materiales utilizados no fueron los más adecuados y donde 20 familias fueron desalojadas por orden de la Alcaldía.

El estudio en Torres del Silencio Yopal que realizaría la UPTC tendría un costo de 350 millones de pesos y estaría a cargo de la Administración Municipal.

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