El hombre que portaba un arma de fuego en medio de las protestas el pasado viernes en inmediaciones del Aeropuerto El Alcaraván de Yopal, resultó ser un soldado profesional que prestaba el servicio de escolta a una de las viajeras.
La explicación la entregó el General Mauricio José Zabala, Comandante de la Octava División del Ejército, al señalar que una joven, a quien protegía el militar, debía viajar de manera urgente para atender una cita médica y además porque su abuela está muy enferma, por lo que en medio del desespero por abordar el avión, la mujer burló una de las barricadas del aeropuerto, le pidió al soldado que le pasara la maleta por encima y cuando el escolta levantó los brazos el arma quedó en evidencia, por lo que la turba se le vino para atacarlo, creyendo que era un Policía infiltrado.
Según el General, el soldado lo que hizo fue asegurar la pistola para que no se la quitaran, pero en ningún momento hubo intención de enfrentar a ninguno de los manifestantes.
El hombre fue retirado del lugar por unidades de la Policía, conducido hacia el Comando donde logró demostrar que estaba ejerciendo labores dentro de su servicio y le aplicaron un comparendo educativo, pues el soldado debió ser precavido y no presentarse con el arma en el lugar de la protesta, que mantenían un grupo de comerciantes del gremio de bares.