El proyecto contempla la creación de las patrullas escolares, donde los jóvenes de décimo y undécimo grado tendrán la posibilidad de cumplir con su trabajo social obligatorio, a través de esta figura.

La actividad de los estudiantes se centrará en capacitar a sus compañeros de otros cursos, en seguridad vial y contribuir con la movilidad en los alrededores de sus colegios, durante la hora de entrada y salida de clases.

Quienes se vinculen con el programa recibirán capacitación en normas de tránsito y seguridad vial por parte de la Dirección, que se encargará igualmente de dotarlos de chalecos reflectores y gestionar ante las autoridades municipales, los demás elementos para que puedan cumplir con las funciones que se le asignarán.

Aunque todavía no se ha establecido con exactitud la fecha de inicio de este programa, sí se conocen los municipios donde se estará implementando la medida. Las poblaciones son Villanueva, Monterrey, Tauramena, Aguazul, Maní y Paz de Ariporo, localidades donde se presentan los mayores índices de accidentalidad en el departamento y que hacen parte de la jurisdicción de la Dirección de Tránsito de Casanare.

“La idea es que ellos nos ayuden a difundir con sus compañeros el respeto por las normas viales. Se escogió este grupo poblacional porque según los reportes, el mayor número de accidentes involucran a personas entre los 14 y 35 años”, explicó el director de tránsito, Juan Carlos Suárez.

Los patrulleros escolares están autorizados para expedir comparendos de carácter pedagógico y simbólico, a todos aquellos conductores (padres de familia por lo general), que sean sorprendidos infringiendo las leyes de tránsito, como el no portar el casco reglamentario, en el caso de los motociclistas, o el exceso de velocidad en zona escolar, entre otras imprudencias.