El alcalde de Orocué, Anderson Bernal, solicitó a las autoridades militares y de Policía que se establezca un registro mensual para el ingreso de personal a las extensas plantaciones de palma de aceite de la región.
"Son más de 2.000 personas provenientes del Urabá y el Chocó que trabajan en las empresas de palmicultores, que no sabemos si es una guarida de delincuentes", señaló el funcionario.
Dijo que es una población flotante que no tiene ninguna vinculación con el municipio de Orocué.
Se calcula que son 3.000 hectáreas sembradas en palma de aceite de propiedad de inversionistas del departamento del Valle.