Para alertar a la ciudadanía sobre el delito de abigeato y su incremento, la Policía seccional Casanare a través de la Estación del corregimiento de “La Chaparrera” inició una campaña de prevención contra el robo de ganado.
Agentes de Policía visitaron este fin de semana 7 expendios de carne en dicho corregimiento para verificar documentos de los negocios, revisar la legalidad y procedencia de los productos cárnicos y efectuar revista a las condiciones sanitarias, advirtiendo que la compra de carne debe hacerse de acuerdo con la norma para evitar sanciones.
Las jornadas que se cumplen conjuntamente entre Ejército y Policía se desarrollan además en puestos de registro y control, para verificar que en los vehículos no se esté transportando carne producto del abigeato o carneo.
Delito que creceEl abigeato es un delito que afecta fuertemente a la población rural y a los ganaderos de Yopal, ocasionando graves pérdidas económicas y colocando en riesgo la salud de las personas, advierten la Policía y el Ejército a los pobladores, a quienes invitan a dar información si llegan a conocer de esas prácticas ilegales.
El sentido de esta campaña es generar la información necesaria para que la gente prevenga el abigeato y exista conocimiento respecto a cuales son las normativas que se deben cumplir para evitar cualquier situación anómala en la comercialización del ganado.
Medidas de prevención contra el AbigeatoAlgunas medidas sugeridas por la Policía que contribuyen al resguardo de los animales y buscan disminuir las posibilidades de ser víctimas del abigeato sugieren, coordinar con vecinos y mantener una buena comunicación con la Policía. Mantener siempre a los animales marcados para facilitar su identificación. Contabilizar los animales por la mañana y por la noche. Realizar mantenimiento periódico de cercos y alambrados donde se encuentran los animales. Y bajo ningún motivo comprar carnes o productos en faenas clandestinas o que no estén debidamente autorizadas.
Por lo general los animales son carneados y despostados en potreros cercanos a los caminos en menos de 30 minutos, dejando solo las patas y la cabeza en el lugar. Hay casos en donde se ha generado muy cerca de lugares habitados, sin que los delincuentes sean descubiertos.