La realización del Censo Nacional de Población y Vivienda, adelantado por el DANE desde enero de este año, estaría incurriendo en fallas en Nunchía al no respetar las delimitaciones fronterizas entre los departamentos de Casanare y Boyacá.

Adelio Robles, concejal de Nunchía, señaló que con el censo se le está quitando parte de su territorio al municipio, puesto que aproximadamente 14 veredas ubicadas en la parte alta de región están siendo censadas, total o parcialmente, como parte del municipio limítrofe de Paya, parte del territorio boyacense.

Según Robles, las veredas San Martín, Vijagual y El Tocaría están quedando en su totalidad como parte de Boyacá. Mientras que los territorios de Piedecuesta, La Virgen, Betania, Alto Tamuría, Palmarito, La Capilla, Pedregal, Magüito y Puerto Payero se dividen parcialmente entre Boyacá y Casanare según la cartografía del personal del DANE.

Por su parte, los pobladores de las veredas afectadas sostienen que no van acceder a ser censados por Boyacá, puesto que se sienten como casanareños y, además, administrativamente dependen del municipio de Nunchía, no de Paya que se encuentra a casi cuatro horas de distancia.

Estas veredas, ubicadas a cuarenta minutos del casco urbano de Nunchía, tendrían una población estimada entre las mil y mil quinientas personas, que, de no solucionarse la problemática, serían incluidas erróneamente como parte de Boyacá o, dada la renuencia a ser censados como parte del departamento colindante, quedarían por fuera de la información estadística del DANE.

Aparentemente, la situación se debe a que las coordenadas establecidas por el Instituto Geográfico Agustín Codazzi (IGAC) y entregadas a los censistas del DANE no corresponden a lo estipulado en el Decreto 870 de 1974 respecto a los límites de los diferentes municipios en que se divide Casanare.

Igualmente, el funcionario público -Robles-, señaló que, pese a que se ha acudido a las autoridades de nivel municipal, departamental y nacional para que tomen medidas sobre esta aparente confusión en la distribución territorial de los límites entre Casanare y Boyacá, a pocos días de que finalice la segunda fase del censo con la recolección de información puerta a puerta, aún no cuentan con respuesta alguna por parte de los entes competentes frente a esta problemática.