José Fernando Gómez Daza, de 35 años, es la persona que manejaba el vehículo en el que salieron las jóvenes Marcela Romero y Alexandra Martínez, desaparecidas desde el pasado 25 de abril y cuyo nombre hasta hace poco fue un misterio.
La señora María Luisa Daza, madre de José Fernando, lo describió como una persona extrovertida, dijo que estaba separado, tenía hijos que residen en Fortul y que su mayor defecto era ser mujeriego.
Gómez Daza tuvo una ferretería en el departamento de Arauca, localizada en la carrera 14 con calle 24 - 46 de Saravena, era el medio económico de sustento de toda la familia, pero debido a las deudas y una quiebra económica fue rematado, informó la mamá del hoy desaparecido José Fernando Gómez Daza, al señalar que aún quedan deudas y que como consecuencia de esa situación eran amenazados.
Según el relato de la progenitora, siguió siendo comerciante y últimamente se dedicaba a la compra venta de vehículos. “Tenía su vida propia, a veces se reportaba”, señaló María Daza, al justificar la demora para reportar a su hijo como desparecido.
María Luisa Daza, de 68 años, es desplazada víctima de la violencia, dijo que hace 18 años también atravesó por un duelo ante el desaparecimiento de su otro hijo en el trayecto de Yopal a Arauca, debido a que el joven había prestado el servicio militar y para los grupos al margen de la ley era prohibido.
La mujer pidió a las autoridades que busquen a las tres personas desaparecidas.
El carro en que se desplazaban fue visto por última vez al norte de Casanare, luego de entregarle un mercado a una abuela de las mujeres, residente en Paz de Ariporo.