Wamonae fue la última comunidad indígena donde llegó apoyo humanitario como soporte a las acciones que se implementan tras la pandemia del coronavirus.
Gracias a un trabajo articulado entre la Dirección Departamental de Gestión del Riesgo de Desastres, el Grupo Aéreo de Casanare y el Gobierno Nacional, después de dos horas de vuelo, se entregaron kits alimentarios a 63 familias de esta población asentada en el municipio de Hato Corozal, perteneciente al resguardo indígena Caño Mochuelo.
A la fecha, según Guillermo Pérez, director de la Gestión del Riesgo en Casanare, se han distribuido mercados en 1.128 familias de los 10 resguardos que habitan en esta región, con unos 4 mil indígenas alcanzados.
"Hemos llevado ayuda humanitaria a 133 familias de Caño Mochuelo, en jurisdicción de Hato Corozal, y a 395 hogares vulnerables de este mismo resguardo en Paz de Ariporo; en Orocué atendimos 480 núcleos familiares en un recorrido por los ocho resguardos, lo que nos llevó varios días de trabajo", puntualizó Guillermo Pérez.
Agregó además que en el resguardo Chaparral Barro Negro se llevó el auxilio humanitario a 120 núcleos familiares.
Las comunidades étnicas reciben una caja de mercado compuesta por 27 productos de 13 categorías diferentes, entre arroz, azúcar, sal, café, frijol, panela, atún, harina de trigo, chocolate, pasta, lenteja, leche en polvo y aceite vegetal, estipulado para cubrir la alimentación de un núcleo familiar de cuatro personas durante 15 días.
En Casanare habitan 10 resguardos indígenas, ubicados en los municipios de Orocué, Paz de Ariporo, Hato Corozal, Sácama y Támara.
En Orocué se encuentran los resguardos El Duya, Paravare, Saladillo, Macucuana, El Médano, El Suspiro, San Juanito y El Consejo.
En Sácama, Támara y Hato Corozal se ubica la población indígena del resguardo Chaparral Barro Negro
En Paz de Ariporo y Hato Corozal el resguardo Caño Mochuelo.