La Unidad para las Víctimas completó con éxito el proceso de protocolización del plan integral de reparación colectiva (PIRC) dirigido a la comunidad étnica en Caño Mochuelo, el primer sujeto étnico en cumplir esta etapa en el departamento de Casanare.
En este evento se socializaron 19 medidas de reparación en temas de restitución, satisfacción, garantía de no repetición, entre otras, que benefician 10 pueblos indígenas y 14 comunidades que conforman este resguardo ubicado entre los municipios de Paz de Ariporo y Hato Corozal.
Miguel Avendaño, director (e) de la dirección territorial en Meta y Llanos, dijo que estas acciones traen bienestar para el territorio y explicó que en esta implementación se restauran y fortalecen los patrones de identidad enmarcados en los componentes sociales, culturales, ambientales y políticos que estructuran la cultura material y simbólica de esta comunidad.
En cuanto al proceso, el directivo dio a conocer que entre junio y julio de este año 2021 la Unidad para las Víctimas realizó cuatro jornadas de diseño y formulación en las que se pudo construir en conjunto con la comunidad víctima estas 19 acciones reparadoras.
Luego de esta concertación se realizó el comité de aprobación, en el cual se definió que el PIRC tendrá una inversión mayor a los $3.000 millones, con acciones que se implementarán entre 2022 y 2024, donde se tiene prevista la entrega y dotación de elementos y maquinas como tractores, lanchas con motores y otros elementos que mejoraran la calidad de vida de las víctimas beneficiarias.
Con la validación y protocolización de este plan colectivo por parte del Ministerio del Interior se garantiza la integridad colectiva, el espacio territorial y el relacionamiento con la red institucional que define el Estado.