Con el propósito de fortalecer los circuitos turísticos en Casanare y aprovechando la riqueza natural de municipios como Sabanalarga, el clúster Turismo de Naturaleza de la Cámara de Comercio de Casanare le está apostando a una estrategia de turismo sostenible que privilegie la calidad por encima de la cantidad de viajeros que acoge mediante un modelo conocido como el turismo slow o el arte de viajar sin prisa.

El movimiento “Cittaslow” o de ciudades lentas surgió en Italia como una alternativa al turismo masivo y le apuesta a servicios y productos turísticos sostenibles y de pequeña escala que sean responsables y respetuosos con la cultura local. Esta forma de turismo, que a la fecha ha reconocido como “ciudades lentas” a 252 ciudades en 30 países, está dirigida a viajeros que quieran tomarse la vida con calma y explorar nuevos rincones desde la inmersión social y el aprecio por el patrimonio local.

Precisamente, es bajo dicho modelo que se busca posicionar a Sabanalarga como un destino de desconexión y descanso para viajeros de todo el país, aprovechando la tranquilidad y el ritmo de vida desacelerado que caracterizan a “la perla del Casanare”. 

Para Gustavo Guevara, representante legal del operador turístico Sabana Travel, el objetivo de hacer de Sabanalarga un destino de turismo slow es que sus visitantes reciban una “experiencia de bienestar” mediante la cual puedan conectar con el entorno y con la cotidianidad de la población local para fomentar una experiencia de viaje centrada en la naturaleza, sin afanes, sin aglomeraciones y que aporte a la reactivación de la economía de los pequeños y medianos empresarios de la región, preservando el entorno natural y cultural del municipio.

Para este fin, empresarios del municipio, de la mano de la Cámara de Comercio de Casanare, han diseñado la iniciativa Sabana al Viento que, en tanto producto turístico, incluye planes que van desde un paseo en bicicletas y triciclos típicos de Sabanalarga y recorridos por una finca chocolatera, hasta caminatas naturales por varios de los tesoros propios de la riqueza hídrica del municipio como la quebrada La Piñalera, las “Termales El Encanto”, entre otras.

Además, de acuerdo con Carlos Rojas, presidente ejecutivo de la Cámara de Comercio de Casanare, mediante este producto turístico creado a partir del trabajo directo con la comunidad, se espera contribuir a la generación de capacidades y habilidades que fortalezcan el tejido empresarial y la economía en el sector del turismo en Sabanalarga.