Utensilios de cocina, hamacas, toldillos, cobijas, elementos de aseo y mercados recibieron las comunidades indígenas de Santa María de Irimene y El Merey del resguardo indígena Caño Mochuelo.
Para llegar a los aborígenes, el gobernador Salomón Sanabria desplazó una misión humanitaria, quienes, en una intensa jornada de trabajo durante todo este puente festivo, enfrentaron las diferentes adversidades en un largo recorrido de más de 20 horas, para brindarle a los indígenas el sustento que les permitirá, entre otras cosas, dormir de una manera más cómoda.
El valeroso trabajo lo desarrolló la Gobernación de Casanare por medio de la Dirección Departamental de Gestión del Riesgo de Desastres, equipo que lidera Arvey Méndez Acosta. Quienes desde el pasado jueves iniciaron el recorrido desde Yopal, cruzando los municipios de Paz de Ariporo y Hato Corozal de Casanare, Tame y Cravo Norte de Arauca; para posteriormente tomar un bongo agua abajo por los ríos Cravo Norte, Casanare, Meta y el caño Aguas Claras.
Además de las ayudas humanitarias, las familias indígenas recibieron también ropa en buen estado, donada por los mismos funcionarios de la Administración Departamental.
Este trabajo que se desarrolla en respuesta a las inclemencias del clima, continuará en otras comunidades apartadas de Paz de Ariporo y Hato Corozal.
María Edapena, capitana de la comunidad El Merey, en lengua nativa envió un mensaje de agradecimiento al Gobernador, señalando que los zancudos y los mosquitos los tenían azotados y muchas familias no tenían toldillos. "Mi comunidad están muy contentos porque llegaron las ayudas humanitarias. Mi casa siempre se anega, hay mucho mosquito y culebra", señaló la líder indígena.