En un giro sin precedentes dentro del sistema judicial colombiano, el general en retiro Henry Torres Escalante, junto a otros ex miembros de la Fuerza Pública, emprenderá un proyecto de reforestación en el páramo de Sumapaz como parte de su condena por su implicación en casi 300 casos de asesinatos extrajudiciales, conocidos como "falsos positivos".
Esta iniciativa marca la primera vez que un oficial de alto rango del ejército admite ante la Jurisdicción Especial Para la Paz (JEP) su participación en estos hechos, abriendo un nuevo capítulo en la búsqueda de la verdad y la reparación del conflicto armado en Colombia.
Torres Escalante, quien tuvo bajo su mando tropas en Casanare entre 2005 y 2008, ha sido una pieza clave en el esclarecimiento de las circunstancias que rodearon la comisión de estos crímenes. Su colaboración con la JEP ha permitido avanzar significativamente en la construcción de un relato más completo sobre el conflicto armado en el país. Ahora, junto a otros 40 exintegrantes de la Fuerza Pública juzgados por el mismo delito, se dispone a comenzar una labor de reforestación en uno de los ecosistemas más importantes y vulnerables de Colombia.
El proyecto, que se iniciará en marzo bajo el nombre "Siembras de Vida", tiene como objetivo plantar 2.800 árboles de especies nativas de alta montaña por cada hectárea del páramo. Esta actividad no solo busca compensar el daño ambiental sino también actuar como un símbolo de vida y esperanza, en contraposición a la muerte y desolación sembrada por los falsos positivos. El mayor (r) Gustavo Enrique Soto Bracamonte, igualmente implicado en estos hechos, se sumará a esta iniciativa, demostrando el compromiso de la JEP con la justicia restaurativa.
Roberto Carlos Vidal, presidente de la JEP, destacó que la reforestación es parte de un enfoque de justicia que va más allá de la reclusión, buscando maneras de resarcir a la sociedad y a las víctimas del conflicto. Este enfoque innovador propone que los responsables de crímenes contribuyan con acciones concretas hacia la reparación del tejido social y el medio ambiente.
Además de la reforestación, el programa incluirá jornadas de diálogo entre los familiares de las víctimas y los imputados. Estas jornadas buscan fomentar la reconciliación y el entendimiento mutuo, creando un espacio para que las historias de dolor sean reconocidas y honradas. La iniciativa espera que el nuevo bosque sirva no solo como un pulmón para Bogotá sino también como un santuario de memoria y reflexión sobre los errores del pasado y la importancia de garantizar que nunca se repitan.
La participación de Torres Escalante en este proyecto sigue a su acto público de perdón en noviembre de 2023 en Yopal, donde reconoció su responsabilidad en la comisión de falsos positivos y ofreció disculpas a las familias afectadas. Este acto de contrición, junto con su involucramiento en el proyecto de reforestación, subraya un momento crucial en la historia de Colombia, donde la justicia y la reparación toman formas innovadoras y significativas, buscando sanar las heridas de un conflicto prolongado y complejo.