Este lunes se inauguró el Centro de extensión para el cacao y la biodiversidad en la Granja El Picón de Yopal. Este espacio se utilizará para la formación, innovación y sostenibilidad de los cacaoteros de Casanare.

En el evento se firmó un Acuerdo de Entendimiento entre la Gobernación de Casanare, la Federación Nacional de Cacaoteros (Fedecacao) y el programa Naturaleza Productiva de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), que tiene como objetivo promover un modelo de producción sostenible que integre la recuperación y conectividad de los bosques con la aptitud cacaotera del departamento, implementando Soluciones Basadas en la Naturaleza (SbN).

El proyecto se centra en fortalecer la producción, transformación y comercialización del cacao, mejorando los ingresos de las comunidades locales y fomentando la conservación de la biodiversidad. Todo ello en línea con los objetivos de agroindustrialización del Plan de Desarrollo “Oportunidades para Casanare”.

Heidy Pérez, coordinadora del programa Naturaleza Productiva en la Orinoquía de USAID, señaló que este proyecto fortalecerá a los actores de la cadena, especialmente a las familias productoras. Resaltó que el centro será clave para la transferencia de conocimiento, tecnología y manejo integral del cultivo, destacando el potencial de los predios cacaoteros.

 Eduard Baquero López, presidente ejecutivo de Fedecacao, expresó que este es un momento histórico para Casanare. Señaló que la entrega de la Granja El Picón es un sueño cristalizado, pues será la casa de los cacaoteros. Este espacio permitirá atender a más de 2.000 familias, fomentar la transformación del cacao y agregar valor, posicionando al departamento hacia la producción de chocolate de calidad.

El centro permitirá a los cacaoteros adquirir herramientas y conocimientos para avanzar en la transformación y comercialización de su producto. Además, impulsará la creación de estrategias de sostenibilidad, consolidando a Casanare como referente en la producción de cacao de alta calidad y en la conservación de su biodiversidad, según el gobierno departamental.

Con este proyecto, la Gobernación no solo busca fortalecer la economía agroindustrial, “sino también posicionar al cacao como un símbolo de progreso y sostenibilidad para las comunidades en la Orinoquía”.