El concejal de La Salina, Carlos Andrés Rodríguez Herrera, en dialogo ayer con emisoras locales, aclaró en Yopal, que no está preso y que el hecho dado a conocer con bombos y platillos por el General Rodolfo Palomino fue el 23 de junio, que al otro día quedó en libertad , y que lo que contó el oficial no fue cierto en su totalidad.

“No tenía ni idea que las volquetas fueran robadas”, afirmó Rodríguez, “me presente voluntariamente en el parqueadero en Duitama donde guardaba una de las volquetas para atender una llamada, donde agentes de la policía me informaban que los vehículos presentaban problemas”.

El general Rodolfo Palomino, director de Tránsito y Transporte de la Policía Nacional, aseguró el domingo que habían encontrado al Concejal ofreciendo los vehículos en los municipios de Sogamoso, Duitama, y Paipa en Boyacá, a 50 millones de pesos cada una. “Lo que pudimos establecer, y esto ya corresponde corroborarlo en el estrado judicial, esta persona sabía del origen de estas volquetas. Un precio tan irrisorio por un equipo que es tan apetecido cuando hay tantas obras en desarrollo, hay debe haber un supuesto de lo que había era un origen ilícito de los vehículos”, señaló el oficial.

Por su parte el concejal Carlos Andrés Rodríguez, afirmó que “el único perjudicado soy yo. Esos carros los compré el 13 de junio porque un amigo me dijo que los estaban vendiendo y tenían precio cómodo. Entregué una parte del dinero, 185 millones de pesos y quedé a la espera de los papeles y el traspaso para cancelar el resto. Nunca los ofrecí porque los necesitaba para trabajarlos, es mentira que digan que yo los estaba ofreciendo, los carros estaban guardados. Cada uno de los vehículos fue adquirido por 90 millones de pesos, porque las volquetas son de segunda”.

Rodríguez, quién actualmente ocupa la Presidencia del Concejo de La Salina, reconoció que el proceso sigue en la Fiscalía por el delito de estafa. Pero aseguró que no le pueden dañar el buen nombre a la gente sin antes agotar una investigación y anunció acciones legales contra la Policía Nacional, por afectar su buen nombre y presentar la información de manera errónea.

“Yo estaba esperando reunir una plata para terminar de pagarle al señor y estaba esperando que él me trajera los documentos que me había prometido, como eran traspasos, manifiestos de aduana y otros documentos, para poderlos movilizar porque la idea mía era ponerlos a trabajar”, según el Concejal.