Con la advertencia de que en ningún caso las áreas sembradas de arroz en el país deben sobrepasar los registros del 2016, el Gerente General de Fedearroz, Rafael Hernández Lozano se viene reuniendo con los agricultores en varias regiones del país para explicar los efectos negativos de una sobreproducción del cereal.
Al tiempo que hizo un buen balance del comportamiento del sector arrocero durante el año anterior, el dirigente Gremial está solicitando a los productores actuar con mesura en relación con las áreas de siembra en el 2017, pues ya se cuenta con las que el país necesita para el autoabastecimiento y un incremento se traduciría en depresión de los precios con riesgo de pérdidas para los productores.
Según Hernández Lozano, en el Casanare, departamento con mayor área cultivada de arroz en el país, se sembraron en el 2016, 139 mil hectáreas y lo recomendable para el 2017 es que no sobrepasen las 130 mil hectáreas.
Por su parte en el Meta se sembraron cerca de 83 mil hectáreas, y se recomienda en el 2017 no sembrar más de 60 mil hectáreas.
“Esto lo hacemos porque queremos que se conserven los niveles de ingreso para los productores, si aumenta el área, va aumentar la producción y se generará una sobre oferta que es negativa para el precio”, concluyo Hernández Lozano.