El pasado 10 de agosto desde el grupo del nuevo fiscal delegado ante la Corte Suprema, Fabio Espitia Garzón, se ordenó llamar a juicio al general (r) Henry Torres Escalante por la muerte de los campesinos, Daniel Torres y Julio Torres, asesinados por miembros del Ejército y luego presentados como guerrilleros muertos en combate.
Por estos hechos, ya fue condenado a 22 años de prisión el teniente Fabián García, quien estaba bajo las órdenes de Torres Escalante.
El pasado 28 de marzo, Henry Torres Escalante se presentó en la Fiscalía, luego que el entonces fiscal, Eduardo Montealegre, firmara la medida de aseguramiento en su contra.
Para ese momento, Torres Escalante todavía era un general activo en el Ejército y se desempeñaba como director de la Oficina de Memoria Histórica de las Fuerzas Militares.
Había desempeñado importantes cargos como la comandancia de la Quinta División del Ejército, de las brigadas IX y XVI y del Batallón No.3 contra el narcotráfico. Por esta razón, su captura fue un hecho histórico. Desde entonces, el general, hoy retirado, se encuentra recluido en el Cantón Norte.
Los falsos positivos por los cuales se llamó a juicio al general en retiro Torres Escalante, ocurrieron en la finca El Triunfo en Aguazul.
Pero en el expediente en su contra, reposa material probatorio que demostraría que Torres Escalante tendría responsabilidad en casi 85 ejecuciones extrajudiciales en Casanare, especialmente en los municipios de Hato Corozal y Paz de Ariporo.