Un intento de homicidio mediante la modalidad de sicariato se registró la noche anterior contra Javier Pérez, el líder del asentamiento Mi Nueva Esperanza de Yopal, quien en horas de la mañana a través de este medio de comunicación había denunciado la presencia de bandas organizadas de venezolanos al servicio del microtráfico, cuyos integrantes portan armas cortas, lanzan tiros al aire y amenazan e intimidan a los residentes para ejercer el control de la zona.

Según se confirmó, dos sujetos a bordo de una motocicleta dispararon con arma de fuego contra la humanidad de Javier Pérez, quien portaba el chaleco antibalas suministrado por la Unidad de Nacional Protección. Uno de los proyectiles quedó incrustado en el plomo del chaleco.

Al parecer se trataría de una retaliación por un hecho registrado el domingo donde un canino de raza Pitbull de propiedad de una familia extranjera atacó a un menor y en el reclamo formulado por los padres se generó una gresca, que terminó con la intervención de la Policía y la salida de los migrantes armados que residían en el asentamiento hacia otro sector.

Javier Pérez en horas de la mañana había convocado a todos los órganos de seguridad y a la secretaría de gobierno a ejercer control de la zona para evitar que los migrantes convirtieran el sector en su centro de operaciones de microtráfico.

Habitantes de Mi Nueva Esperanza denunciaron que son amedrentados con armas de fuego.