En una operación del Ejército Nacional, la Fuerza Aeroespacial, la Policía y la Fiscalía, fue desmantelado un laboratorio para la producción de cocaína en zona rural de Orocué. La estructura tenía capacidad para fabricar más de seis toneladas de droga al mes y era parte de la red de financiamiento ilegal del Clan del Golfo.
Las autoridades incautaron estufas industriales, generadores eléctricos, cilindros de gas, tubos galvanizados, mangueras, 20 hornos microondas y dos marcianos con capacidad de más de 1200 galones. Además, se hallaron más de 3000 kilogramos de insumos sólidos y cerca de 32.000 galones de insumos líquidos utilizados en el procesamiento del alcaloide.
Según la Brigada 16 del Ejército, la droga producida en este laboratorio tenía como destino carteles de Centroamérica, con posterior envío a Norteamérica y Europa. Los equipos y materiales encontrados estarían valorados en aproximadamente 4000 millones de pesos, lo que representa un duro golpe financiero al Clan del Golfo y su red de narcotráfico en Casanare, Meta y Boyacá.
Previo al ingreso de las tropas, técnicos antiexplosivos del grupo Marte inspeccionaron el terreno, ya que se tenía información de que el grupo criminal habría instalado artefactos explosivos para evitar la intervención militar.