El municipio de Maní continúa en alerta por las inundaciones registradas como consecuencia de la fuerte ola invernal que ha generado el desbordamiento de varios ríos, informó el Comandante de Bomberos en el Departamento de Casanare, Harvey Ramírez, al señalar que el organismo de socorro realiza el monitoreo de la emergencia.
Hasta la noche de ayer el Comité de Gestión del Riesgo Municipal y Bomberos adelantaba la fase de evaluación de daños ocasionados y el análisis de necesidades de las comunidades que resultaron damnificadas.
En las últimas horas la Secretaría de Gobierno de Maní consolidó el censo de las familias afectadas y espera en los próximos días llegar con las respectivas ayudas humanitarias.
Dentro de los sectores más afectados están la vereda San Joaquín de Garibay donde el agua ingresó a las viviendas y las familias debieron salir de sus viviendas; igualmente en las veredas La Llanerita, Mararabe, Guafal pintado, Santa María de Palmarito, Guinea, La Poyata y las Islas, entre otras.
Los afectados reclamaron la presencia de la Unidad de Gestión del Riesgo Departamental para que apoye a las familias damnificadas.