La tenencia de erizos como mascotas puede poner en riesgo la biodiversidad de la región por múltiples aspectos, principalmente porque pueden portar enfermedades que no son propias de las especies nativas o competir con ejemplares endémicos por espacio o alimento.

Por lo anterior, la Corporación Ambiental Cormacarena recomendó no apoyar ni promover la venta y compra de erizos, ya que estos son considerados animales exóticos, víctimas del tráfico ilegal de fauna, que son extraídos de su hábitat natural e introducidos a un ambiente diferente al de su país de origen, en este caso del continente africano.

Investigaciones de autoridades han reconocido que, por medio de las redes sociales personas se están lucrando con la venta de erizos, una problemática que, si no se controla, estos animales pueden llegar a convertirse de especies exóticas a invasoras, teniendo en cuenta las altas tasas de reproducción que tienen. 

En el departamento del Meta, se ha identificado la presencia de erizos debido a rescates o entregas voluntarias por parte de los habitantes; en días anteriores residentes del barrio la Rochela en Villavicencio, reportaron a la línea de fauna silvestre la aparición de un ejemplar en el Polideportivo del sector; al parecer este había escapado de alguna vivienda cercana.