Por Carlos Cárdenas Ortiz*

Hace 30 años un puñado de amigos de Casanare, acompañábamos al Dr. Ali de J. Dalel por los pasillos donde estaba funcionando la constituyente con estos documentos en la mano, haciendo fuerza para que Casanare fuera departamento.

Como Asistente Parlamentario en esa época del Representante a la Cámara por Boyacá Dr. Ali de J., alguito aporté chuzografiando, investigando y ayudándole a sustanciar su proyecto, su idea: erigir la Intendencia de Casanare. ¡Y lo logró! El Congreso de la República le aprobó el Primera Vuelta y cosas de la vida, podríamos decir que el proyecto, la segunda vuelta la dio en la Constituyente de 1991.

La historia HOY le reconoce al Dr. Ali de J. Dalel Barón este logró, no sólo para Casanare sino para las antiguas intendencias y comisarías.

Hoy seguimos los casanareños y las antiguas intendencias y comisarías como cuando éramos intendencia. Veamos:

1. No hay un casanareño o un llanero nombrado como directivo de los 450 altos cargos de la nación que nombra directa o indirectamente el Presidente de la República de turno
2. Casanare y la región llanera sigue por fuera, porque jamás participa de los billones de pesos que anualmente dispone el gobierno central para realizar obras públicas. ¡Sean serios! las obras que tenemos incluso las que están haciendo en Casanare y la región se han construido y se financian con nuestras regalías, sin un peso de la nación
3. Casanare y el llano ha soportado el uso y el abuso del negocio de petróleo, entre todas las demás políticas públicas y nunca ha participado en la formulación y la estructuración de la Política Petrolera del país. Nuestros ríos sin agua, nuestra flora y fauna deteriorada y el daño social sufriéndolo hace décadas.
4. Ha visto o conoce un Casanareño o un llanero en la nómina nacional de los partidos políticos? Y eso que en las elecciones de 2018 y 2019 los casanareños por reposición de votos le regalamos a los partidos políticos casi 6.000 millones de pesos. Y en la región 25 mil millones por este mismo concepto.
5. Los empresarios, los inversionistas de Casanare y el llano siguen también por fuera. No los vemos en el negocio de la vivienda social, en las concesiones viales, en las concesiones del espectro electromagnético; en las concesiones para la explotación petrolera, entre otros negocios del estado.

Celebremos entre casanareños y hermanos llaneros, porque el vecino del gobierno central nos mantiene como los botones de las guayaberas.

 *Ex Senador de Casanare

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