La fuga de un oleoducto está presentando una grave afectación a las aguas del Caño Ocumo, en inmediaciones de la comunidad indígena de El Resguardo Duya, municipio de Orocué, situación que obligó al gobierno departamental a exigir la intervención de las autoridades para solucionar el problema.
De acuerdo con la información suministrada por funcionarios de la Secretaria de Gobierno y Desarrollo Comunitario, la Defensoría del Pueblo, y un delegado de la organización regional indígena de Casanare ORIC, quienes verificaron en compañía del Gobernador del Resguardo El Duya, hasta la fecha no se ha registrado presencia de los organismos ambientales ante los hechos ocurridos desde el 19 de febrero del 2014.
Según la versión de los indígenas, mientras realizaban sus actividades de pesca en el Caño Ocumo, observaron que una mancha negra y algunos peces muertos descendían por la corriente del agua. Los nativos buscaron el origen de la mancha donde hallaron la ruptura de un tubo, al parecer, según ellos, perteneciente a la empresa Perenco, de donde proviene el derrame de crudo y la contaminación ambiental consecuente.
A pesar de que el Gobernador del resguardo El Duya, Juan José Pumené dio pronto aviso a las autoridades ambientales, estas aún no han hecho presencia en el lugar, situación que está afectando seriamente la pesca y recolección silvestre que son parte esencial de su sustento y seguridad alimentaria.
Por su parte, la secretaria de Gobierno y Desarrollo Comunitario, Marlene Gutiérrez Oropeza, manifestó que, enterado de los graves hechos, el Gobernador de Casanare, Marco Tulio Ruiz, dirigió ayer una comunicación con registros fotográficos de afectación a la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales, y a Corporinoquia con el propósito de que dichas autoridades adopten con urgencia las medidas de atención y recuperación de la zona afectada, y evitar que la mancha negra se extienda hasta el Caño El Duya en donde desemboca el Ocumo.