Unos 600 barriles de petróleo se vertieron al Caño Gandul en jurisdicción rural de San Luis de Palenque.

Unas pocas personas de la comunidad son las únicas que trabajan en la atención del desastre ecológico, debido a la inestable situación que se genera allí por un sector de la comunidad contra las empresas petroleras que operan en el sector.

Según finqueros de la zona, el derrame causó una gran mancha aceitosa que podría llegar al río Meta.

Se espera que hoy lleguen hasta allí equipos profesionales de contingencia de este tipo de emergencias, al igual que las autoridades ambientales.

Según se estableció, el grave episodio contra el medio ambiente se registró el pasado sábado en horas de la tarde, cuando un grupo de personas encapuchadas ingresaron al Pozo Careto 1, intimidando a los operarios y obligándolos a abandonar las instalaciones del Pozo sin cerrar las válvulas.

Según el comandante de la Policía en Casanare, coronel Narciso Martínez, la acción de hecho de los encapuchados generó el derrame de crudo.

La situación se enmarca en las protestas que continúan en ese sector del departamento contra la compañía petrolera Petromagdalena.

Los daños a la fauna y flora del sector son evidentes con la muerte de aves y peces en los alrededores del sector afectado por la grave emergencia ambiental.

Finqueros de la zona exigieron la judicialización de las personas responsables del derrame, al no permitir a los operarios del pozo, el cierre de las válvulas.