El 10 de septiembre, en todo el mundo, se conmemora el Día de la Prevención del Suicidio, una jornada dedicada a aumentar la conciencia sobre este tema crítico y ofrecer apoyo a aquellos que luchan con pensamientos suicidas. Comunidades, organizaciones y personas de diferentes rincones del planeta se han unido para destacar la importancia de la prevención y la promoción de la salud mental.
¿Qué es el suicidio?
Entendemos el suicidio como un acto de quitarse deliberadamente la propia vida. El comportamiento suicida es cualquier acción que pudiera llevar a una persona a morir, como tomar una sobredosis de medicamentos o estrellar un automóvil a propósito.
Posibles causas
El suicidio y los comportamientos suicidas generalmente ocurren en personas con uno o más de los siguientes factores:
Trastorno bipolar
Trastorno límite de la personalidad
Depresión
Consumo de drogas o alcohol
Trastorno de estrés postraumático (TEPT)
Esquizofrenia
Historial de abuso sexual, físico y emocional
Cuestiones de vida estresantes, como problemas serios a nivel financiero o en las relaciones interpersonales.
Las personas que intentan suicidarse con frecuencia están tratando de alejarse de una situación de la vida que parece imposible de manejar. Muchos de los que cometen intento de suicidio están buscando alivio y no realmente el deseo de no estar vivo.
Síntomas
A menudo, pero no siempre, una persona puede mostrar ciertos síntomas y comportamientos antes de un intento de suicidio, entre ellos:
Tener dificultad para concentrarse o pensar claramente
Regalar las pertenencias
Hablar acerca de marcharse o la necesidad de "dejar todos mis asuntos en orden"
Cambio repentino en el comportamiento, sobre todo calma después de un período de ansiedad
Pérdida de interés en actividades que solía disfrutar
Tener comportamientos autodestructivos, como tomar alcohol en exceso, consumir drogas ilícitas o hacerse cortaduras en el cuerpo
Alejarse de los amigos o no querer salir
Tener problemas repentinos en el colegio o el trabajo
Hablar acerca de la muerte o el suicidio o incluso declarar el deseo de hacerse daño
Hablar acerca de sentirse sin esperanza o culpable
Cambiar los hábitos alimentarios o de sueño
Preparar maneras de quitarse su propia vida (como comprar un arma o muchas pastillas)
Tratamiento
Es posible que las personas que están en riesgo de comportamiento suicida no busquen tratamiento por muchas razones, incluso:
Creen que nada va a ayudar.
No desean contarle a nadie que tienen problemas.
Piensan que buscar ayuda es un signo de debilidad.
No saben adónde acudir por ayuda.
Creen que sus seres queridos estarían mejor sin ellos.
Una persona puede necesitar tratamiento de emergencia después de un intento de suicidio. Se pueden necesitar primeros auxilios, reanimación cardiopulmonar o tratamientos más intensivos.
Prevención
El hecho de evitar el alcohol y las drogas (diferentes a los medicamentos recetados) puede reducir el riesgo de suicidio.
En hogares con niños o adolescentes:
Almacene todos los medicamentos recetados en una parte alta y bajo llave.
No guarde alcohol en la casa o manténgalo bajo llave.
No guarde armas de fuego en la casa. Si las tiene, guárdelas bajo llave y coloque las balas en un lugar separado.
En adultos mayores, investigue a profundidad los sentimientos de desesperanza, de ser una carga y de no pertenecer. Muchas personas que tratan de suicidarse hablan del tema antes de hacer el intento. Algunas veces, simplemente hablar con alguien a quien le importe y que no haga juicios es suficiente para reducir el riesgo de suicidio.
Siempre tome en serio los intentos y amenazas de suicidio. Si usted o alguien que usted conoce está pensando en el suicidio, llame o envíe un email al correo saludmentalcapresoca@gmail.com indicando: nombre completo, DI, y numero de contacto.
También puede llamar a la línea amiga 3184222722 o comunicarse a la línea CRUE 3173717451 o ir a la sala de emergencias del hospital o centro de salud más cercano.