Varios contratistas por Orden de Prestación de Servicio de la Alcaldía de Yopal denunciaron que pese a presentar oportunamente sus cuentas, cumplir con todos los requisitos y tener orden de pago lista en la Secretaría de Hacienda municipal, la Tesorera no quiere pagar las cuentas, sin ninguna explicación.
Señalaron los afectados que son cuentas irrisorias cuya cuantía no asciende a los 2 millones de pesos cada una y que son más de cien personas los afectados, que trabajaron en la Dirección de cultura, Acción social y la Secretaría de Educación.
Uno de los denunciantes señaló que, ante la urgente necesidad de responderle a sus hijos con la compra de útiles escolares y uniformes, se acercaron a la Secretaría de Hacienda a preguntar por el pago, donde fueron sacados casi a empujones por parte de la Tesorera, Nohora Esperanza Ortiz Tarazona, quien además trató mal a sus subalternos por haber permitido el ingreso de las personas.
El maltrato fue denunciado por parte de varios funcionarios ante el Sindicato de Empleados Públicos del Municipio de Yopal, que emitió una carta donde le solicitan a la funcionaria dar un trato respetuoso al personal de la Secretaría de Hacienda.
Según se conoció, la Tesorera Nohora Esperanza Ortiz Tarazona, es funcionaria de libre nombramiento y remoción que llegó a la Alcaldía en el Gobierno del destituido JJ Torres y que permanece atornillada en el cargo amparada por la Ley de garantías.
La comunicación emitida por el Sindicato, Sindepy señala: “Considerando la solicitud elevada por un grupo de afiliados a nuestra organización, nos permitimos amablemente solicitarle procure dar un trato respetuoso al personal de la Secretaría de Hacienda ubicado en el sector de la ventanilla y en general a todos los ciudadanos que acuden a su despacho para ser atendidos toda vez que el día de ayer 16 de enero de 2018 en horas de la tarde, usted salió muy ofuscada de su oficina y con términos displicentes e insultos reclamó al personal por permitir el ingreso de los ciudadanos a la tesorería para preguntar por el trámite de sus cuentas retrasadas, hechos que ocurrieron delante de varios funcionarios ciudadanos presentes en el momento, situaciones que generan maltrato laboral, además de una pésima imagen institucional. Por lo anterior la conminamos a moderar su comportamiento y que el mismo se ciña a los postulados del respeto y del servicio público, pues, aunque usted ostente el cargo de tesorera, tiene las mismas obligaciones de atención al público de cualquier otro empleado de la entidad”.