En el parque de la Iguana en Yopal crece un nuevo asentamiento ilegal por cuenta de familias venezolanas que se establecieron en la zona. Se ubican en improvisados refugios cubiertos con plásticos y mantas, cocinan con fogones de leña y en la ribera del río hacen sus necesidades.
Son alrededor de ocho familias, conformadas en su mayoría por jóvenes madres y niños menores de 14 años, las que invadieron la ronda del río Cravo Sur para guarecerse mientras huyen de Venezuela pidiendo ayuda humanitaria.
Habitantes de la zona centro de la ciudad exigieron a las autoridades que se desaloje el otrora sitio turístico conocido “El pajonal” para evitar un nuevo foco de inseguridad, pues en el lugar también conviven habitantes de calle.
De otro lado, predios sobre la margen derecha vía Marginal del llano Yopal - Aguazul, a la altura del intercambiador vial, también son invadidos por venezolanos. En lotes del sector establecieron sus cambuches para guarecerse en la noche, mientras en el día salen por las principales calles de la capital a rebuscar su sustento.
Aunque cada uno de los venezolanos tiene su drama, lo que más llama la atención son los niños que crecen en medio de las necesidades, riñas y peleas familiares, algunos señalan que van de paso, pero otros aseguran que se van a establecer en la capital casanareña.