Habitantes de la calle, migrantes y consumidores de estupefacientes, nuevamente se tomaron el canal de aguas lluvias conocido como “Caño Seco” en el centro de Yopal, según la denuncia presentada por la Presidente del barrio La Esperanza, Miryam Cachay, quien señaló que los lugares de residencia de esas personas ahora son debajo de los puentes, generando desordenes, peleas y convirtiendo esa infraestructura en letrinas públicas.
“Se escuchan gritos, peleas, vulgaridades y diversas situaciones que perturban el sueño de la comunidad”, indicó la líder del barrio, al agregar que el sitio es inseguro en horas de la noche, pues emergen del caño delincuentes que están al asecho de sus víctimas y finalmente se refugian nuevamente allí.
Las rejas que habían instalado conjuntamente entre Alcaldía y Comunidad para evitar que los consumidores se alojaran debajo de los puentes, ya no existen, pues fueron retiradas y al parecer vendidas por ellos mismos en chatarrerías, indicó Cachay.
Doña Miryam señaló que a los extranjeros y consumidores se sumó un grupo de indígenas que se están tomando el parque del antiguo cementerio, por lo que han tenido que pedir operativos a la Policía para despejar el área en diferentes oportunidades.
Finalmente, la líder comunal denunció que una Chatarrería que funciona en el sector “recibe toda la noche lo que los consumidores de vicio recogen”, acabando con el silencio y la tranquilidad que los vecinos del céntrico sector requieren para descansar.