La comunidad LGBTIQ+ del departamento de Casanare rechazó el brutal asesinato de Sara Millerrey, una joven mujer trans que fue golpeada y asesinada en el departamento de Antioquia. El caso que despertó una profunda indignación por la crueldad de los hechos y la aparente indiferencia de quienes fueron testigos o conocieron de su sufrimiento, dejo en evidencia un caso de persecución contra una persona de este género en Yopal.
Desde el Programa OSIGD (Orientaciones Sexuales e identidades de Género Diversas) de la Secretaría de Desarrollo Social del municipio de Yopal, su director Camilo Ramírez, expresó su rechazo contundente frente a este crimen de odio. “No solo nos duele su muerte, nos duele también la indiferencia de quienes no se solidarizaron ante su dolor. Fue brutalmente golpeada, deshumanizada. Esto es un hecho desgarrador que nos enluta como comunidad”, afirmó.
Ramírez señaló que, en Yopal, se estima que hay unas diez mujeres trans, cinco identificadas actualmente en el territorio, aunque muchas hacen parte de una población flotante. El funcionario reconoció que una de las lideresas trans ha acudido en múltiples ocasiones a la oficina por sentirse insegura y agredida en su lugar de trabajo, ella es sexoservidora. “Hemos activado todos los canales institucionales, desde la Secretaría de Gobierno hasta la Defensoría del Pueblo, pero aún falta mucho por hacer”, dijo
Ramírez hizo un llamado a la ciudadanía a no ser cómplice de la violencia con el silencio ni con discursos de odio. “Nos preocupa la deshumanización que se ve en redes sociales. ¿En qué momento la gente se creyó con el derecho de agredir a otro solo porque se ve o se expresa diferente?”.
Finalmente, envió un mensaje de resistencia y unidad a la población LGBTIQ+ del país: “Estamos en una época compleja, con sectores que quieren arrebatarnos derechos. No bajemos la guardia. El derecho a vivir y a ser como uno quiere ser debe ser respetado siempre. La oficina OSIGD seguirá luchando por cada vida diversa”.