Más de 40 drogodependientes volvieron a la calle luego de que la Alcaldía de Aguazul ordenará el cierre de la Fundación “Mi señor, Mi salvador” en la que se rehabilitaban 54 personas en un establecimiento que funcionaba en una granja ubicada en el sector de San José del Bubuy.
La orden de la Administración Municipal fue dada ayer luego de hacer una visita de inspección a través de la Secretaría de Salud de esa localidad, bajo el sustento de presuntas irregularidades, tales como que los jóvenes se querían ir, situación que fue manifestada como obvia por sus coordinadores, ya que, debido a los síntomas de abstinencia de los consumidores de drogas, una de sus urgencias es querer volver a sitios donde puedan consumir.
En el operativo fue atropellada una mujer por una patrulla de la Policía quien resultó con heridas de consideración, sin que el conductor se detuviera a prestarle los primeros auxilios o permitiera que se hiciera el respectivo croquis, según se denunció.
Se conoció que tan pronto ingresó la comisión al Centro de rehabilitación y los consumidores vieron la oportunidad de salir se formó una gresca y atacaron la patrulla de la Policía con herramientas como palas y picas que ellos utilizaban en las labores diarias de granja dentro del proceso de rehabilitación. Entre tanto los menores de edad que había en el lugar quedaron a cargo de la Comisaría de Familia que hizo el pertinente procedimiento para regresárselos a las familias.
Una de las Coordinadoras de la Fundación permanece retenida por la Policía y será sometida a proceso de judicialización ante los daños que sufrió la patrulla de la Institución y la agresión a funcionarios de la Administración Municipal por parte de los drogopendientes que tan pronto vieron la comisión al interior del establecimiento reaccionaron violentamente.
“Como no tienen más que hacer, fueron a complicarle la vida a estos muchachos que están labrando la tierra, intentando superar las drogas, hubo agresiones mutuas y arroyaron con una patrulla oficial a una señora de la fundación y se fueron campantes sin prestar auxilio. El Alcalde no puede cerrar una fundación por que se le antoja. En Colombia hay algo llamado debido proceso. La Alcaldía de Aguazul no tiene capacidad de respuesta ni accionar para disminuir la drogadicción, pero si agrede a los esfuerzos que actores sociales realizan”, opinó Wilson Acosta Gaviria, quien viene trabajando con la problemática de la drogadicción en el departamento.