Renzo Amaya, ex gerente del Hospital de Aguazul, instauró una denuncia en la Procuraduría contra la Administración Municipal, al denunciar que la Alcaldesa Johana Moreno y el Asesor Jurídico, Javier González Gil, lo presionaron a firmar en el mes de marzo al momento de posesionarse de su cargo, una carta de renuncia irrevocable, que fue utilizada en el mes de julio.
Amaya informó que en ese momento le argumentaron que era una política de la Alcaldesa para que los gerentes no se separaran de los lineamientos de su gobierno, la cual firmó ante una situación apremiante de trabajo, pues llevaba más de tres meses sin empleo y era “firmar la carta y acceder a la gerencia, o seguir desempleado, por lo que me vi coaccionado”, dijo.
El ex gerente del Hospital denunció el hecho ante la Procuraduría Regional y solicitó que se anule el acto administrativo de destitución y se le reintegre al cargo.
Según Amaya, su despido se precipitó cuando le indicó a la Subdirectora del área de salud del Hospital que le iba a pedir la carta de renuncia por no estar desarrollando plenamente sus funciones.
El decreto por medio del cual se aceptó la renuncia fue emitido por Johana Moreno el 20 de agosto de 2020, sin embargo, Amaya quiso expresar su inconformidad y se presentó a laborar, pero ya se había hecho el cambio de guardas de las puertas y fue notificado que, justamente la Subdirectora del área de salud, era la nueva gerente.
Uno de los argumentos que utilizara Renzo Amaya, es que la carta fue firmada en marzo y a partir del 1 de abril de 2020 todos los documentos figuran con otra firma, que se puede comprobar en los actos administrativos que reposan en la Entidad. Igualmente, que la carta de renuncia se debe presentar ante la Junta Directiva del Centro Médico.