Stephanie Eller, al frente de la subdelegación del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) para el nororiente colombiano, presentó un detallado informe sobre la situación de orden público en el departamento de Arauca, comparándolo con el panorama nacional durante el año 2023.
Los resultados del reporte son preocupantes, ya que indican que Arauca se sitúa en el primer lugar en desapariciones forzadas para el año 2023, con un total de 79 casos registrados, superando con creces la cifra de más de 200 desapariciones contabilizadas en el resto del país. Esto representa aproximadamente un tercio de todas las desapariciones forzadas reportadas en Colombia.
Sin embargo, lo más alarmante es que estas cifras podrían no reflejar la totalidad de la problemática, ya que el CICR señala que muchas desapariciones no son denunciadas por sus familiares ante las autoridades pertinentes, lo que dificulta tener un panorama exacto de la magnitud del fenómeno en el departamento de Arauca durante el año pasado.
Pero las desapariciones forzadas no son el único flagelo que aqueja a la región.
A pesar de una disminución en los desplazamientos forzados, el informe revela un preocupante aumento en los casos de confinamiento. Esta situación ha generado un clima de temor entre la población, especialmente entre los más vulnerables, como niños y personas mayores, quienes se ven privados de acceder a servicios básicos como la educación y la atención médica, ante el riesgo de quedar atrapados en medio de la violencia que azota la región.
En este contexto, la comunidad internacional y las autoridades colombianas enfrentan el desafío urgente de abordar las causas subyacentes de la violencia en Arauca, así como de implementar medidas efectivas para proteger a la población civil y garantizar el respeto por los derechos humanos en la región.