Hoy se conmemora el Día de los Pueblos Indígenas con reflexiones sobre la situación que afrontan diez resguardos del departamento de Casanare.

Los asentamientos se encuentran en jurisdicción de los municipios de Sácama, Hato Corozal, Támara, Paz de Ariporo y Orocué, con 5.148 habitantes, según censo avalado por el Ministerio del Interior.

“La falta de agua potable y alimentación continúan siendo los problemas más agudos de la población”, conceptuó Ana Lucía Pirabán, responsable de asuntos indígenas en la Secretaría de Gobierno Departamental.

El Ministerio de Agricultura contrató este año a través del Gobernador indígena Gerardo Alí Rodríguez García 1.600 millones de pesos para seguridad alimentaria, pero los resultados no se observan, señaló la funcionaria.

La difícil situación de los Resguardos Indígenas del departamento se viene agudizando por cuenta de hechos de inseguridad que se presentaron durante los últimos meses, cometidos por integrantes de las mismas etnias.

Personal que labora en el sector de la Salud con sede en Paz de Ariporo que presta sus servicios a las comunidades de Caño Mochuelo y los pueblos Sáliva han sido víctimas de robos de sus pertenencias, según se informó.

La situación ha sido expuesta a las autoridades indígenas para que se adelanten las correspondientes investigaciones y se sancione a los responsables.

Se suma el conflicto con ganaderos en varios municipios por ataques y robo de semovientes.