Transportadores de carga de Casanare protestan desde ayer en el llenadero de Araguaney, de propiedad de Perenco, para reclamar oportunidad laboral, pues luego de la cuarentena salieron de sus casas a buscar trabajo y notaron que el cargue lo hacían vehículos que no son de la región.

“Son alrededor de 400 vehículos los que están quietos, mientras sus propietarios y conductores ven pasar a carros de otras regiones cargados”, dijo Luis Gabriel Sanabria, vocero del gremio, al reclamar de la compañía Impala la participación que les corresponde, pues contrató con una empresa foránea que no les ha permitido trabajar.

Los dueños de los vehículos señalaron que la cadena del transporte se paró, pues los vehículos contratados por Impala no usan los talleres de Casanare, tampoco compran alimentos o insumos en el departamento, por lo que pidió de las autoridades el respaldo a sus peticiones.

Específicamente la reclamación se la hacen a la transportadora Impala que llegó al Departamento desde hace dos años, y desde entonces ha sido nula la participación a los camioneros de Casanare, pues siempre ha llamado a vehículos de otras regiones.

A la fecha se han enviado varios correos y las llamadas telefónicas no han obtenido respuesta de parte de Impala, ni de Perenco.