Londarly Barragán, esposa de Álvaro Barragán, aseguró que su esposo es víctima de un falso positivo tras ser acusado de pertenecer a un grupo guerrillero. Álvaro se encuentra recluido en la cárcel de La Guafilla, en Yopal, desde mayo de este año, luego de que la justicia revocara la medida de detención domiciliaria que inicialmente le había sido otorgada.
Según Londarly, la captura de su esposo se produjo el 31 de mayo de 2024, cuando miembros de la Armada llegaron a su finca en Miramar de Guanapalo con una orden de captura. Posteriormente, se realizó un allanamiento por parte de la Policía Judicial, el cual, según ella, no cumplió con los procedimientos legales establecidos.
Londarly afirmó que la acusación contra su esposo se basa en los testimonios de dos personas que aseguran que Álvaro ha sido miembro activo de un grupo guerrillero desde 1999, cuando él apenas tenía 12 años. La familia atribuye estas declaraciones a posibles venganzas relacionadas con disputas por tierras que Álvaro defendió en el pasado.
La esposa de Barragán afirmó que su familia se ha dedicado toda su vida a la agricultura y la ganadería. "Lo poco que hemos logrado ha sido trabajando honestamente. No es justo que nos señalen y destruyan nuestra integridad familiar", expresó.
Londarly también relató las difíciles condiciones que enfrentan desde la detención de Álvaro, especialmente su hijo, quien tenía tres años en el momento de la captura y ha desarrollado un trauma al ver uniformados. Además, recordó un ataque previo ocurrido en abril de 2022, cuando miembros del Ejército irrumpieron en su finca sin orden judicial y dispararon, generando temor en la familia.
Durante la visita del ministro de Defensa, Iván Velásquez, y altos mandos militares a Yopal, Londarly hizo un llamado urgente: "Que las autoridades revisen este caso y tantos otros que pueden ser falsos positivos. Solo queremos justicia y volver a nuestra finca para vivir en paz".
En carteles que exhibió durante la jornada, la familia exige que se esclarezca la situación de Álvaro Barragán y se respeten sus derechos como campesinos.