Con la voz entrecortada por el dolor, Zully Quiñones, madre de Herin Leandro Quiñonez Garrido, un niño de 8 años que murió tras ser atropellado por un camión de placas OME563 en el municipio de Trinidad, el 23 de enero de 2024, hizo un llamado público para que el conductor responda ante la justicia.
La mujer señaló directamente a Jeison Esteban Anzueta Patiño, presunto responsable del hecho, pidiéndole que dé la cara ante la Fiscalía General de la Nación y el juez del municipio de Orocué. “Ese señor no sabe el dolor con que yo cada día me levanto, que entienda el dolor que causó. Mi hijo ya va a cumplir dos años de haber partido y él sigue libre como si nada hubiera pasado”, expresó con indignación.
Quiñones denunció que, pese al tiempo transcurrido, el caso no ha tenido avances significativos, lo que ha incrementado la sensación de impunidad en su familia. También pidió que la aseguradora del camión cumpla con sus obligaciones, señalando que, aunque nada devolverá la vida de su hijo, la justicia debe cumplirse.
Finalmente, la madre hizo un clamor desesperado: “Lo único que pedimos es justicia. Que se haga responsable, que se ponga la mano en el corazón y que este caso no quede en el olvido, porque mi hijo tenía derecho a vivir y él apagó su luz para siempre”.