Desde el pasado domingo y bajo estrictas medidas de seguridad, comenzó la distribución de los primeros kits con las tarjetas y formularios electorales que se utilizarán para las elecciones de autoridades locales del próximo 30 de octubre.
Así mismo, los cubículos y las urnas que se utilizarán en la jornada del 30 ya fueron despachados hacia bodegas en cada departamento del país.
Un total de 20 días y noches demora el delicado operativo de despacho y transporte del material electoral que utilizarán los jurados de votación y los sufragantes el próximo 30 de octubre para elegir alcaldes, gobernadores, diputados, concejales y ediles.
Se producirán y distribuirán 91.197 cajas con material electoral para los 10.271 puestos de votación instalados en 1.102 municipios del país. De estos puestos, 6.534 están ubicados en zonas rurales.
Aviones, helicópteros, lanchas, chalupas, mulares y cualquier medio de transporte utiliza la Registraduría Nacional del Estado Civil para garantizar que los kits electorales recorran las rutas diseñadas por tierra, mar y aire y puedan para sortear las dificultades climáticas y topográficas de la geografía nacional.
El proceso de producción del kit electoral se realiza en Bogotá. El kit sale de una estantería denominada “colmena”, baja por un tobogán metálico y luego un grupo de operarios enfila las cajas, las pasa por una banda transportadora que a través de una antena ‘lee’ el contenido de cada una de ellas y verifica mediante radiofrecuencia que tengan las tarjetas electorales completas para cada corporación.
Después de pasar este control, la caja se deposita en una estiba y éstas son depositadas en los camiones que salen cuando completan la carga. Mediante un software que monitorea ‘la colmena’ y lee los chip insertados en cada caja, se realiza el monitoreo del transporte para asegurar que cumplirá la ruta y llegará a su destino. Cada ruta puede tardar entre 3 y 4 días.
El sistema de control diseñado permite identificar la ubicación y contenido de cada uno de los kits electorales. El monitoreo dispuesto hace posible informar de manera inmediata si una caja en particular ya está lista para iniciar la ruta de distribución teniendo en cuenta la mesa, el puesto, la zona, el municipio y el departamento a donde debe llegar todo el material.
Destinos difíciles
Las dificultades del terreno señalan el orden de producción y distribución del kit electoral. La prioridad es para los destinos de difícil acceso como los antiguos territorios nacionales, el Sur de Bolívar, la zona de Nariño, Tumaco y zonas apartadas de Antioquia. Los últimos en salir son los que corresponden a Bogotá.
Hay trayectos que demoran hasta 12 horas. Para llegar al municipio de Achí, por ejemplo, en el departamento de Bolívar, los funcionarios recorren seis horas por tierra desde Cartagena hasta Magangué. De allí, toman chalupa para hacer un recorrido de tres horas por el río Magdalena y el río Cauca que los conduce a la localidad. Un poco menos, es decir 4 horas pero un recorrido similar, les toma a los funcionarios llegar hasta San Jacinto del Cauca en el mismo departamento de Bolívar.
Llegar hasta el municipio Campo Alegre en el departamento de Guainía implica salir de Puerto Inírida en dirección a Camanaos (Vaupés) en un viaje en avión de dos horas. De Camanaos, deben salir en lancha por un recorrido de siete horas para luego emprender una jornada a pie de cinco horas por trocha con el fin de llegar a Campo Alegre.
En el litoral Pacífico, uno de los sitios de más difícil acceso es López de Micay, en el departamento del Cauca. El material parte de Cali en un recorrido de 4 horas para llegar al Puerto de Buenaventura. En barco, el trayecto es de 12 horas para alcanzar a López de Micay, 5 horas si se quiere llegar al litoral de San Juan en Chocó, 15 horas para Guapi y 18 horas para llegar a Timbiquí.
En el departamento de Nariño, uno de los municipios más alejados es Santa Bárbara de Iscuandé. El trayecto se inicia en Pasto y toma ocho horas para llegar a Tumaco por vía terrestre. Posteriormente, cogen una lancha en un desplazamiento de 10 horas por el río Santa Bárbara.